Capítulo 3.- Constricciones a la Perfección (52)

Uno de los principales mensajes de este libro es que, para muchos propósitos, es mejor considerar que el nivel en el que la selección actúa no es el organismo, ni el grupo ni cualquier unidad mayor, sino el gen o pequeño fragmento genético. Este difícil tema se debatirá en los próximos capítulos. Por el momento, es suficiente observar que la selección a nivel del gen puede dar lugar a imperfecciones aparentes a nivel del individuo. Discutiré el "impulso meiótico" y los fenómenos relacionados en el capítulo 8, pero el ejemplo clásico es el caso de la ventaja heterocigota. Un gen puede ser seleccionado positivamente por sus efectos beneficiosos cuando es heterocigoto, a pesar de que tenga efectos dañinos cuando es homocigoto. Como consecuencia, una proporción predecible de los organismos individuales en la población tendrá defectos. El punto general es el siguiente. El genoma de un organismo individual en una población sexual es el producto de una mezcla más o menos aleatoria de los genes en la población. Los genes se seleccionan sobre sus alelos debido a sus efectos fenotípicos, promediados sobre todos los cuerpos individuales en los que se distribuyen, a través de toda la población, y a través de muchas generaciones. Los efectos que tiene un determinado gen dependerán de los otros genes con los que comparte un cuerpo: la ventaja heterocigótica es sólo un caso especial de esto. Una cierta proporción de cuerpos malos parece una consecuencia casi inevitable de la selección de buenos genes, donde bueno se refiere a los efectos promedio de un gen en una muestra estadística de cuerpos en la que se encuentra combinado con otros genes.


Inevitable, esto es, en tanto aceptemos el orden aleatorio mendeliano como dado e inevitable. Williams (1979), decepcionado al no encontrar pruebas de una adaptación de ajuste fino en la proporción de sexos, apunta lúcidamente que:

    El sexo es sólo uno de los muchos rasgos de la descendencia que parecería adaptativo que tuviera control parental. Por ejemplo, en las poblaciones humanas afectadas por la anemia de células falciformes, sería ventajoso para una mujer heterocigota fertilizar sus huevos A sólo con el esperma de un portador de a, y viceversa, o incluso abortar todos los embriones homocigotos. Sin embargo, si se apareó con otro heterocigoto se someterá con toda seguridad a la lotería mendeliana, aunque esto signifique una aptitud marcadamente reducida para la mitad de sus hijos... Las preguntas realmente fundamentales en evolución sólo pueden ser respondidas obervando cada gen como, finalmente, en conflicto con cada otro gen, incluso los que están en otros loci en la misma celda. Una teoría realmente {53} válida de la selección natural debe basarse, en última instancia, en los replicadores egoístas, en los genes y en el resto de entidades capaces de acumulación sesgada de diferentes formas variantes.

¡Amén !