viernes, 28 de noviembre de 2014

Capítulo 3.- Constricciones a la Perfección (51)


Para el panglossiano, la demostración de que algo es "beneficioso" (para quién o para qué muchas veces no se especifica) es una explicación suficiente de su existencia. El adaptacionista neodarwiniano, por otra parte, insiste en conocer la naturaleza exacta del proceso selectivo que ha llevado a la evolución de la adaptación putativa. En particular, insiste en un lenguaje preciso sobre el nivel en el que se supone que la selección natural ha actuado. El panglossiano mira a una proporción sexual de uno a uno y ve que es buena: ¿no reduce al mínimo el desperdicio de los recursos de la población? El adaptacionista neodarwiniano considera en detalle los destinos de los genes que actúan sobre los padres para sesgar la proporción de sexos de su descendencia, y calcula el estado evolutivamente estable de la población (Fisher, 1930a). El panglossiano está desconcertado en la proporción de sexos 1:1 de las especies polígamas, en las que una minoría de los machos sostienen harenes y el resto se sientan alrededor en rebaños de solteros que consumen casi la mitad de los recursos alimenticios de la población sin contribuir para nada en la reproducción de la población. El adaptacionista neodarwinista toma esto con calma. El sistema puede ser terriblemente costoso desde el punto de vista de la población, pero, desde el punto de vista de los genes que influyen en la característica  implicada, no hay mutante que pudiera hacerlo mejor. Mi visión es que es que el adaptacionismo neo- darwinista no es un cajón de sastre, una fe ciega en que todo está hecho para lo mejor. Descarta de los tribunales la mayoría de las explicaciones adaptativas que pueden darse fácilmente para el panglossiano.

Hace algunos años, un colega recibió una solicitud de un estudiante de futura licenciatura deseando trabajar en la adaptación, que fue criado como fundamentalista religioso y no creía en la evolución. Creía en las adaptaciones, pero pensaba que fueron diseñadas por Dios, diseñadas para el beneficio de... ¡ah, pero ése es justo el problema! Se podría pensar que no importa si el estudiante creía que las adaptaciones fueron producidas por la selección natural o por Dios. Las adaptaciones son "beneficiosas", ya sea debido a la selección natural o debido a un diseño benefactor, ¿y no podía un estudiante fundamentalista emplearse de forma útil en descubrir las formas detalladas en las que son beneficiosas? Mi visión es que este argumento no es válido, porque lo que es beneficioso para una entidad en la jerarquía de la vida es perjudicial para otra, y el creacionismo no nos da motivos para pensar que se preferirá el bienestar de una entidad a otra. De paso, el estudiante fundamentalista podría parar a preguntarse en un Dios que se esfuerza en proveer a los depredadores con hermosas adaptaciones para atrapar a sus presas, mientras con la otra mano da a las presas adaptaciones hermosas para frustrarlos. Tal vez goza del deporte como espectador. Volviendo al punto principal, si las adaptaciones fueron diseñadas por Dios, podría haberlas diseñado para beneficiar al animal individual (su supervivencia o - no es lo mismo - su aptitud inclusiva), a las especies, algunas otras especies como la humanidad (el punto de vista habitual de los fundamentalistas religiosos), el "equilibrio de la naturaleza", o algún otro propósito inescrutable{52} que sólo Él conoce. Estas alternativas son con frecuencia incompatibles. Es realmente importante en beneficio de quién están diseñadas estas adaptaciones. Hechos como la proporción de sexos en mamíferos que forman harenes son inexplicables por ciertas hipótesis y fácilmente explicables por otras. El adaptacionista trabajando en el marco de una adecuada comprensión de la teoría genética de la selección natural enfoca sólo un conjunto muy restringido de las posibles hipótesis funcionales que el panglossiano admitiría.

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